Ruta: Herradura del Barbate.
"Lo importante no es el fin del camino, sino el camino.
Quien viaja demasiado aprisa se pierde la esencia del viaje" (Louis L'Amour).
Detalles del recorrido
El itinerario transcurre por las marismas del Barbate mediante el camino de Manzanete que discurre por la vía pecuaria Cordel de la Barca a Manzanete. Recorrido entre pinares de pino piñonero y las huertas de La Herradura de la vega del río Barbate.
Mapa del recorrido. |
Longitud
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9,7 km. Circular
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Dificultad
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Baja.
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Tiempo
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4 horas
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Fecha
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Verano/2014
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Lugar
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La Janda.
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La valoración de la dificultad, según nuestras apreciaciones, y el tiempo de realización de la ruta se conforman de acuerdo con las características del recorrido de la misma.
Varios son los elementos que tenemos en cuenta para valorar la dificultad del itinerario: el perfil de alturas o variaciones de desnivel, la orografía del terreno y la longitud del recorrido.
En el tiempo de realización interviene, ademas de la dificultad del itinerario, la contemplación del entorno natural y étnico que se encuentran en el trayecto.
Por supuesto estas valoraciones no tienen que coincidir con las estimaciones de otras personas, son totalmente orientativas. Planifica bien el recorrido y ten en cuenta un elemento determinante, la climatología.
En el tiempo de realización interviene, ademas de la dificultad del itinerario, la contemplación del entorno natural y étnico que se encuentran en el trayecto.
Por supuesto estas valoraciones no tienen que coincidir con las estimaciones de otras personas, son totalmente orientativas. Planifica bien el recorrido y ten en cuenta un elemento determinante, la climatología.
RUTA
Una cancela en la entrada de la cantera de áridos corta el carril. Por la derecha se abre una arroyada estacional por la que discurre un sendero en bajada. |
Acabado el descenso, conectamos con el Cordel de la Barca a Manzanete. |
Ante nuestros ojos comparece la Herradura de la vega del río Barbate con magnificas vistas al hermoso pueblo de Vejer de la Frontera. |
Hacia el sur se desarrollan las marismas del río Barbate. |
En la vega, cubierta por el pastizal, abundan las cigueñas. |
El ganado vacuno pasta tranquilamente en la llanura. |
Tomamos el camino a la derecha acercándonos a la Barca de Vejer. Se vislumbra el caserío de vejeriego flanqueado por dos molinos harineros con sus aspas al viento. |
Por la izquierda, el Molino Harinero de Viento de San José ubicado en el Parque de los Vientos. |
Por la derecha del pueblo, el Molino Harinero de Viento de la Cruz de Conil. |
Pasamos por una zona donde anidan las cigüeñas en las copas de los pinos y sobre las torretas eléctricas. |
Llegamos a las primeras casa de la Barca de Vejer. |
Como se dijo al principio, el otro punto de inicio de la ruta se sitúa junto a la N-340 dirección Tarifa y tras una curva muy pronunciada en una zona de ventas y restaurantes. |
Cruzamos el caserío de La Barca, pasando junto a una antigua calera. |
Giramos la marcha en sentido sur por el Camino del Soto, escoltados por los llanos del Torno de Isidro y el cauce del río Barbate. |
El ganado vacuno pasta en el llano de la vega. Al fondo el vasto bosque de pinos piñoneros. |
Río Barbarte en La Herradura. |
Arribamos al mirador natural, que al estar mas elevado en la ladera del cerro permite obtener buenas panorámicas de La Herradura y Marismas del Barbate y de Vejer. |
Primer plano de Vejer, diseñado por los nazaríes, que alberga recoletas calles encaladas, con aires medievales y huellas moriscas, rodeada de murallas y esplendidas vistas panorámicas. |
Los meandros del Barbate serpenteando por las marismas próximas al mar. |
Con el zoom a tope se divisa la villa de Barbate. |
Estas edificaciones estaban orientadas hacia el sur en busca de la luz y de espaldas al viento de norte. |
El sendero se aproxima a las casas de El Soto. |
Después de superar el núcleo rural de El Soto volvemos a cambiar el sentido de la marcha en dirección oeste buscando el punto de partida. Una amplia pista discurre en el pinar del Monte del Medio. |
A un lado del camino se encuentra una gran gravera abandonada. |
Vejer siempre presente en el panorama. |
Solo queda tomar el sendero que nos devolverá a las inmediaciones del Camping de Vejer. |
Avanzando por el pinar, echamos una ultima mirada a Vejer de la Frontera. |
Durante el trayecto en la vega del Barbate, oteamos el cielo buscando captar el vuelo del Ibis Eremita desde sus nidos en La Barca de Vejer al campo de golf de Montenmedio, o viceversa, pero solo hemos conseguido observar otras aves, como un aguilucho, un buitre y bastantes cigüeñas. Una vez acabado el recorrido nos trasladamos al roquedo donde se ubican los Ibis Eremitas en La Barca de Vejer.
IBIS EREMITA
En La Barca de Vejer han nidificado varias parejas de Ibis Eremita (Geronticus eremita), una especie en grave peligro de extinción que esta siendo recuperada por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, a través del proyecto Eremita. Esta colonia junto a otra en la Sierra del Retín, son la segunda en importancia, a nivel mundial, tras la existente en el norte de Marruecos.
La elección del lugar donde se han instalado estas aves, se debe a que de la dieta forma parte una serie de insectos que proliferan en zonas húmedas y con vegetación rasa como los campos de golf, muy cercanos en la Dehesa de Montenmedio, hasta los que vuelan para alimentarse.
Los asentamientos se encuentran junto a la desembocadura del río Barbate y frente a la costa Atlántica. Al oeste se abren los llanos de la antigua laguna de La Janda, desecada con fines agrícolas, hoy ocupados por pastizales y cultivos herbáceos. Esta depresión se encuentra cerrada por el norte por las colinas de Vejer de la Frontera y Conil de la Frontera, dedicadas a pastos y cultivos. El clima de la zona puede sintetizarse en la suavidad de las temperaturas invernales, la fuerte sequía estival y un régimen de vientos dominantes del este. Los pastizales ocupan los lugares más bajos, colinas y laderas.
Esta zona presenta condiciones climáticas y ecológicas muy similares a las del Parque Nacional de Souss-Massa (Marruecos). Los lugares de cría están asegurados gracias a la presencia de acantilados costeros en el Parque Natural Pinar de la Breña y Acantilados de Barbate.
Fuente: Zoobotanico de Jerez.
El ibis eremita (Geronticus eremita) es un ave de tamaño medio de 70–80 cm y 1 a 1.5 kg, perteneciente a la Familia Threskiornithidae. Adulto, pico curvo y de color rojo. Cuerpo cubierto de plumas de color negras con reflejos metálicos. Cabeza y garganta desprovistos de plumas. Presentan un penacho de plumas en la nuca. Es un ave colonial, muy social. Busca alimento y nidifica en grupos sobre acantilados.
Es una especie bastante terrestre que habita en zonas áridas o semiáridas de estepas, pastizales y campos de cultivos, cercanos a zonas escarpadas como acantilados o cortados rocosos.
Se alimenta de invertebrados y pequeños vertebrados. Principalmente de escarabajos, saltamontes, grillos, caracoles, arañas, lombrices, escorpiones, larvas, lagartijas, eslizones y pequeños mamíferos. Normalmente se alimenta en pequeños grupos, rastreando con el pico el terreno, la vegetación, agujeros en las rocas y debajo de las piedras a la búsqueda de sus presas.
Comienzan a construir los nidos, en Febrero, para hacer la puesta de Marzo a Abril. Normalmente ponen de 2 a 4 huevos que son incubados durante 28 días. Macho y hembra participan en el cuidado y alimentación de los pollos. Los jóvenes volanderos hacen sus primeros vuelos a los 43 o 47 días.
El Ibis eremita es una de las aves más amenazadas del planeta, catalogada como en situación crítica. El 96% de la población mundial ha desaparecido en los últimos 80 años.
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